Desde la arquitectura sostenible hacia el diseño consciente de joyas

Mi experiencia en construcción ecológica ha moldeado profundamente la forma en que hoy diseño joyas. Durante más de una década trabajé bajo estándares rigurosos para certificar edificios sostenibles—evaluando cada etapa del proceso: desde el origen de los materiales y cómo se producen, hasta la distancia que recorren y el ciclo de vida completo del producto final.

Esa misma mentalidad guía ahora mis decisiones en el taller: cada elemento se elige con cuidado, teniendo en cuenta su procedencia, su proceso de fabricación y su impacto ambiental al final de su vida útil.

Materiales reciclados y recuperados

Selecciono cuidadosamente plata reciclada, vidrio de mar, piedras, plásticos y hasta perlas reutilizadas—muchas veces rescatadas personalmente de casas de empeño locales, donde puedo verificar su autenticidad y darles una segunda vida.

Al reutilizar estos materiales, reduzco la demanda de recursos recién extraídos y evito que objetos valiosos terminen en vertederos.

Cuando no encuentro ciertos cierres o cadenas en plata reciclada, opto por componentes fabricados localmente para reducir la huella de carbono y al mismo tiempo apoyar a pequeños productores.

Producción artesanal en pequeñas cantidades

Todas mis piezas están hechas a mano en series limitadas. Este enfoque artesanal y pausado permite cuidar cada detalle y evita los excesos típicos de la producción en masa.

Menos unidades fabricadas también significa menor consumo energético y menos residuos.

Técnicas respetuosas con el medio ambiente

Utilizo métodos tradicionales de orfebrería como la fundición a la cera perdida, combinados con técnicas de soldadura que emplean fundentes menos tóxicos.

Los restos de metal se funden nuevamente y se reutilizan, reduciendo al máximo el desperdicio y alargando el ciclo de vida de cada recurso.

Diseño consciente y durabilidad

Inspirándome en las formas orgánicas de la naturaleza, diseño cada joya para que sea atemporal, no dictada por las modas.

Una pieza bien hecha vive mucho más, evita reemplazos frecuentes y reduce su impacto ambiental a largo plazo.

Packaging con conciencia

Cada joya se protege con relleno de fibras naturales y se presenta en bolsas de algodón o yute.

Estampo a mano todos los materiales de marca con tintas ecológicas, y utilizo cajas y papel reciclado, reduciendo residuos sin renunciar a una experiencia de empaquetado cuidada y especial.

Proximidad y transporte verde

Trabajo con proveedores locales siempre que es posible, para disminuir las emisiones del transporte y apoyar la economía cercana.

Además, realizo la mayoría de mis desplazamientos en bicicleta o transporte público, reduciendo mi huella de CO₂ y manteniendo todo el proceso lo más amable posible con el planeta.

Una nota final

Mi misión es crear joyas únicas y sostenibles que generen conexiones más profundas—con la naturaleza, con nuestros valores y con las historias que llevamos dentro.

Cada pieza refleja un compromiso con las decisiones conscientes y una forma más suave y respetuosa de habitar este mundo.